Ducha Escocesa

Como ducha alternante de agua caliente y fría o ducha de contraste o también ducha escocesa, se conoce el procedimiento de alternar el duchar con agua de temperatura caliente y fría. Se emplea en la hidroterapia, que es la utilización del agua como agente terapéutico.

Beneficios

    • Reactiva la circulación sanguínea y busca tonificar profundamente la piel del cuerpo.
    • Estimula las células cutáneas, porque masajea superficialmente. Es por esta razón que la ducha escocesa es ideal para pacientes que necesitan calmar el estrés y lograr un equilibrio mental y físico.
    • Las células muertas de la piel tienden a desaparecer, porque la ducha es exfoliante y produce una profunda limpieza. La energía del cuerpo se renueva y el estado de ánimo suele elevarse.
    • Es sabio que la terapia con agua a alta presión es favorable para terminar de una vez por todas con el molesto problema de la celulitis.

 

En resumen, los beneficios de la ducha escocesa no son sólo de relax sino que aumentan el flujo y la circulación de la sangre, proveen calor al cuerpo, estimulan el organismo, alivian los dolores, las contracturas musculares. El sueño suele aparecer, el pulso se acelera y la respiración mejora.